La Federación Luterana Mundial expresa su conmoción y simpatía por el asesinato de siete trabajadores por la paz en el estado de Ecuatoria Oriental, Sudán del Sur, el 29 de abril. Los delegados de Sudán del Sur a una conferencia de paz viajaban con Norwegian Church Aid cuando ocurrió el ataque.
“Estamos profundamente conmocionados y condenamos este acto de violencia”, dice la Secretaria General de la FLM, la Dra. “Nuestras oraciones están con las familias de las víctimas y con los trabajadores humanitarios que presenciaron este ataque”.
“No hay excusa para este ataque”
Según el Ministerio de Información de Sudán del Sur, los siete fueron asesinados el sábado en Imehejek, en el estado de Ecuatoria Oriental, después de asistir a una conferencia de paz y recibir una oferta de transporte en automóviles de la NCA. Fueron a disipar las tensiones entre dos comunidades por las incursiones de ganado, una razón frecuente de conflictos locales en el país. Tres empleados de NCA, también de Sudán del Sur, escaparon ilesos, dijo NCA. El ataque aún está bajo investigación.
No hay excusa para atacar a quienes buscan resolver conflictos o prestar ayuda vital.
Dra. Anne BURGHARDT, Secretaria General de la FLM
El Secretario General de la FLM hizo hincapié en la necesidad de respetar el espacio humanitario. “Hemos estado trabajando en Sudán del Sur durante 50 años en algunas de las circunstancias más difíciles. Es necesario respetar la neutralidad y la integridad de la labor humanitaria. No hay excusa para atacar a quienes buscan resolver conflictos o entregar ayuda vital”.
Compromiso compartido en Sudán del Sur
NCA es un socio de larga data de la FLM en varios países. La FLM y la NCA comparten un complejo en Juba y trabajan en el estado de Ecuatoria Oriental. “Ambas organizaciones comparten el compromiso con la protección y asistencia de todas las personas necesitadas, así como con la paz de Sudán del Sur”, dice Lokiru Yohana, Coordinador Regional del Programa de la FLM para Sudán del Sur y Uganda. “Este ataque contra los promotores de paz comunitarios en presencia de trabajadores humanitarios nos afecta a todos”.