Al parecer, las inundaciones en distintas partes del mundo están causando estragos y pérdidas enormes, entre ellas Pakistán, quienes ya tienen a más de mil personas fallecidas por las lluvias.
La reciente temporada de lluvias en el país ha dejado hasta ahora unos 1.033 fallecidos, incluyendo a unos 348 niños, todo desde mediados de Junio; acerca de los heridos, CNN reportó que hay unas 1.527 personas en esta condición.
Según la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres (NDMA), durante las últimas 24 horas otras 119 personas murieron y unas 71 están heridas.
Al menos unos 33 millones de personas se han visto afectadas por las inundaciones en el país, según Sherry Rehman, la ministra de Cambio Climático de Pakistán, quien expresó que éste es el “peor desastre humanitario de la década”.
Para ayudar de la mejor manera posible, la organización cristiana World Mission está trabajando para brindar todo su apoyo a los afectados, y aprovechar esta oportunidad de poder compartir el evangelio con ellos.
“Muchos musulmanes no darían ningún momento del día al cristianismo. Ahora, debido a los horrores que están experimentando, los cristianos tienen una gran oportunidad para alcanzarlos. Así que eso es lo que nuestros socios están haciendo en el campo”, dijo Greg Kelley, director de la organización a Mission Network News.
“Están amando a estas personas en el nombre de Jesús. Están distribuyendo nuestras Biblias en audio con energía solar en su idioma nativo”, agregó.
La información que los socios de World Mission explica que la principal fuente de ingreso de los pakistaníes es a través de las tierras para cultivar, lo que fue arrasado por las lluvias; asimismo las personas necesitan suministros médicos y refugios.
De igual manera el gobierno pakistaní movilizó a un personal para atender las situaciones de emergencia en las zonas afectadas por las inundaciones; la población más afectada de ellas es Sindh, quien solicitó 1 millón de tiendas de campaña a la vez que Baluchistán, la provincia cercana, no cuenta con los servicios de electricidad, gas e internet.
Ahsan Iqbal, el ministro de Planificación y Desarrollo, informó a Reuters que el 15% de su población se vio afectada por las lluvias, lo que es un aproximado de 30 millones de personas sin hogar, heridas y otros sin familia.
Además, unos 150 kilómetros de carreteras en todo el país fueron dañados por las lluvias y 82.000 viviendas quedaron completamente destruidas; desde junio hasta hoy más de 130 puentes han sido dañados por las aguas.
Esta oportunidad representa una demostración de amor de los cristianos hacia los pakistaníes, en su mayoría musulmana, quienes se sienten realmente conmovidos por las atenciones recibidas.
“Algunas de las cosas que les dicen acerca de los cristianos se desmoronan cuando alguien se les acerca y les dice: ‘Cuidemos a su familia, aquí hay una manta, aquí hay una lona, aquí hay una carpa’”, testificó Kelley.