La persecución cristiana en Latinoamérica está creciendo a niveles realmente preocupantes, un ejemplo de ello es la situación que viven las comunidades religiosa en Nicaragua y como éstas son violentadas por su fe.
Según distintas informaciones suministradas por Evangélico Digital, el gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua mandó a confiscar todos los bienes a la Misión Cristiana Verbo, la cual ha ejecutado proyectos sociales en hospitales, iglesias y comunidades desde 1980; asimismo les despojaron de su personalidad jurídica.
La orden emitida por el Ministerio del Interior el viernes (19) traspasó los bienes de la ONG al Estado.
«La Asociación Misión Cristiana Verbo impidió, a través de sus proyectos, el control y vigilancia de la Dirección General de Registro y Control de entidades sin fines de lucro del Migob y del Ministerio de la Familia como entidad garante de la protección de los niños, niñas y adolescentes en Nicaragua, desconociendo las actividades que se desarrollan en esta casa de internamiento”, expresó el gobierno nicaragüense en su defensa.
Dicha ONG no se ha pronunciado aún sobre el caso ni si sus iglesias permanecerán abiertas, pero otras investigaciones afirman que el sitio web de la misión ya fue desactivado, los informes de sus proyectos sociales con Casa Bernabé, orfanatos que estaban en Veracruz y Bilwi, desaparecieron.
Previamente, el presidente de Nicaragua le había prometido a los grupos evangélicos que tendrían seguridad jurídica para sus templos y obras sociales, incluso entregó títulos de propiedad de los templos de la Iglesia Asamblea de Dios como prueba.
Como parte de la misión de la ONG, ellos trabajaron en orfanatos, clínicas y escuelas atendiendo a muchas personas, además implementaron estaciones agrícolas, centros de discipulado y formación profesional y programas de alimentación para niños por muchos años.
Desde 1980, la misión fue creada y establecida por el por el pastor estadounidense Robert Louis Trolese en 1980, ayudó al pueblo nicaragüense durante la revolución sandinista a través de alimentos, vivienda y evangelización.
“Misión Cristiana Verbo se dedicó por completo al trabajo social y de evangelización sin fines de lucro y la mayoría de sus recursos provienen de personas físicas y jurídicas, incluidas iglesias que profesan la misma fe cristiana”, dice el sitio web de la misión.
Por su parte, el gobierno de Ortega sigue violando los derechos humanos y la liberta religiosa de su país con el cierre de iglesias sin importar su denominación y deportando a los líderes religiosos; hasta ahora se sabe que unas 2.600 ONG mayormente evangélicas fueron prohibidas por las autoridades mientras que sus dirigentes fueron llevados a prisión.