Cinco meses después del ataque de Hamas contra Israel y el inicio de la operación militar en Gaza, ha habido una pérdida catastrófica de vidas, dice la Federación Luterana Mundial en una declaración publicada el 5 de marzo. Decenas de miles de personas han sido asesinadas, ahora hay informes de personas, incluidos niños, que mueren de hambre. Por otro lado, no hay avances en las negociaciones para liberar a los rehenes retenidos en Gaza, ni en un alto el fuego humanitario.
La FLM también expresa su profunda preocupación por la polarización que este conflicto ha causado en todo el mundo, con ataques y discriminación contra personas y comunidades judías y palestinas.
La FLM pide un “compromiso inquebrantable” y un “fuerte liderazgo” por parte de la comunidad internacional para resolver el conflicto.
Declaración
Esta semana se cumplen cinco meses desde el ataque de Hamas contra Israel y el inicio de las operaciones militares de Israel en Gaza. Desde el 7 de octubre se ha producido una pérdida catastrófica de vidas. Muchos más han resultado heridos, la infraestructura ha sido destruida y se ha producido un desplazamiento forzado de civiles a gran escala. Las negociaciones para un alto el fuego, el acceso a la ayuda humanitaria y la liberación de los rehenes retenidos por Hamas no han dado lugar a una solución a corto ni a largo plazo.
La situación humanitaria en Gaza se ha deteriorado rápidamente desde el inicio de la guerra. Ahora hay informes devastadores de niños que mueren debido al hambre y la deshidratación. También existe un riesgo cada vez mayor de propagación de enfermedades, agravado por el impacto de la guerra en los suministros médicos y los hospitales
Es fundamental que las negociaciones en curso conduzcan a un acuerdo que garantice la liberación de todos los rehenes y una cesación del fuego para facilitar la ayuda humanitaria a la población civil afectada. Se necesita urgentemente un acuerdo sólido que pueda allanar el camino para la paz y la seguridad. Para ello será necesario un liderazgo genuino y un compromiso inquebrantable de las partes beligerantes y de la comunidad internacional para resolver el conflicto actual.
La FLM también está profundamente preocupada por el hecho de que la guerra en Gaza haya llevado a un aumento de la polarización en todo el mundo, reavivando sentimientos hostiles y de odio hacia los pueblos judío y palestino, lo que ha llevado a casos de violencia contra individuos y comunidades.
La FLM reza por todas las personas afectadas por la guerra y la violencia y reafirma su compromiso con la presencia y el testimonio cristianos en Tierra Santa.
La FLM se solidariza con su iglesia miembro, la Iglesia Evangélica Luterana en Jordania y Tierra Santa, el personal del Programa de Jerusalén de la FLM y las personas a las que sirven en su lucha en estos tiempos difíciles.
